YO TUVE HAMBRE

Yo tuve hambre,
y tú formaste un club humanitario
para discutir el problema
del hambre en el mundo.
Gracias.

Yo estuve en la cárcel,
y tú te retiraste
a tu iglesia en los suburbios
y oraste por mi liberación.

Yo estuve desnudo,
y en tu mente
tú consideraste la moralidad
de mi apariencia.

Yo estuve enfermo,
y tú te arrodillaste
y agradeciste a Dios
por tu salud.

Yo no tenía hogar
y tú me predicaste un sermón
sobre el abrigo
del amor de Dios.

Yo estuve solo
y tú me dejaste solo
para orar por mí.

Tú pareces tan santo,
tan cerca de Dios...
Pero yo aún estoy hambriento
y solo,
y con frío.

Anónimo

Comentarios

Entradas populares de este blog

VELANDO DEBIDAMENTE

ESCRITO EN LOS LIBROS DEL CIELO

JOSUÉ: PERSEVERANTE EN SU FE