¿CUÁL ES TU CURRICULUM?

Hace poco hubo en mi país un gran revuelo político por el nombramiento de un alto funcionario judicial, en el que se cuestionaba entre otras cosas la veracidad de su "curriculum". El asunto acabó con la renuncia del postulante.
¿Qué es un currículum?
Más propiamente "curriculum vitae", expresión latina, que significa carrera de la vida. Hace referencia a la calidad de las experiencias (educacionales, laborales, vivenciales) de una persona.

Si éste es necesario para conseguir un empleo, vale preguntarse cual es el currículum que debe exhibir un cristiano ¿Qué calificaciones son necesarias?
El salmo 15 proporciona un modelo apropiado para los que desean habitar las mansiones celestiales: "Jehová, ¿quién habitará en tu tabernáculo? ¿Quién morará en tu monte santo? El que anda en integridad y hace justicia, y habla verdad en su corazón. El que no calumnia con su lengua, ni hace mal a su prójimo, ni admite reproche alguno contra su vecino. Aquel a cuyos ojos el vil es menospreciado, pero honra a los que temen a Jehová. El que aun jurando en daño suyo, no por eso cambia; quien su dinero no dio a usura, ni contra el inocente admitió cohecho. El que hace estas cosas, no resbalará jamás" Salmos 15:1-5.
La Biblia también da ejemplos de personas que gozaban de las calificaciones que son aprobadas por el cielo:

• Moisés: "Y aquel varón Moisés era muy manso, más que todos los hombres que había sobre la tierra". Números 12:3 
• Natanael: "Cuando Jesús vio a Natanael... dijo de él: He aquí un verdadero israelita, en quien no hay engaño". Juan 1:47
• Los siete diáconos: "Buscad, pues, hermanos, de entre vosotros a siete varones de buen testimonio, llenos del Espíritu Santo y de sabiduría". Hechos 6:3
• David: "Quitado éste, les levantó por rey a David, de quien dio también testimonio diciendo: He hallado a David hijo de Isaí, varón conforme a mi corazón". Hechos 13:22

 Lo que surge de los pasajes que anteceden, es que para ir al cielo, no podemos presentarnos de cualquier manera o con antecedentes menores. Necesitamos una justicia perfecta, una integridad a toda prueba, un carácter sin tacha y una fidelidad sin resquicios.

¿Y quién posee tales antecedentes? ¡Ningún ser humano!

Felizmente hubo Uno, el Hijo de Dios, que alcanzó los estándares de la perfección; quien ofrece colocar en nosotros su perfecta justicia y ayudarnos a alcanzar una simetría de carácter que pueda pasar la prueba de la eternidad.

Nuestro maravilloso Salvador Jesús vivió una vida perfecta y tuvo un registro sin mancha. Fue tentado en todo, pero sin pecado. Y lo más hermoso de todo es que lo hizo por nosotros; para socorrernos, para limpiarnos, para habilitarnos para la plena comunión con los seres celestiales.

A todos los que lo aceptan, los convierte en muestras de su gracia; hombres, mujeres, niños o ancianos que presenta ante el universo como trofeos de su amor. Son sus hijos amados, su orgullo y su más grande gozo, los que le vindican ante el universo.

"Y Jehová dijo a Satanás: ¿No has considerado a mi siervo Job, que no hay otro como él en la tierra, varón perfecto y recto, temeroso de Dios y apartado del mal?" Job 1:8
¿Cómo puedo ser yo, como puedes ser tu uno de ellos?
Solamente por la gracia de Cristo recibida en el alma. Solamente por la fe en los méritos de la sangre de Jesús. Solamente por el poder del Espíritu Santo. No hay otra forma.
Al recibir en el corazón el amor a la verdad para ser salvos, Dios actúa en nosotros, cambiando nuestro caracter pecaminoso y dándonos un nuevo corazón, tal como lo afirma la cita siguiente: "Abrazamos la verdad de Dios con nuestras diferentes facultades, y al colocarnos bajo la influencia de esta verdad, ella realizará en nosotros la obra que nos dará idoneidad moral para formar parte del reino de gloria y para departir con los ángeles celestiales. Estamos ahora en el taller de Dios. Muchos de nosotros somos piedras toscas de la cantera. Pero cuando echamos mano de la verdad de Dios, su influencia nos afecta; nos eleva, y elimina de nosotros toda imperfección y pecado, cualquiera que sea su naturaleza. Así quedamos preparados para ver al Rey en su hermosura y unirnos finalmente con los ángeles puros y santos, en el reino de gloria. Aquí es donde nuestro cuerpo y nuestro espíritu han de quedar dispuestos para la inmortalidad". {2TI 318.2}
Pide al Señor ese currículum.